Esta tarde Carlos Bianchi arribó a Casa Amarilla tras su reunión de ayer con Ischia en Mar del Plata y estampó su firma en el contrato que lo liga como manager del club. Es por tres años, cobrará 1.750.000 dólares y no podrá ser el técnico en ese tiempo.
Camisa blanca, camioneta negra. El celular pegado a la oreja. Así Carlos Bianchi volvió al club donde ganó todo. Llegó a Casa Amarilla, caminó por los pasillos de la Bombonera, se reunió con los dirigentes y estampó su firma en el contrato que lo vincula con el Xeneize por tres años a cambio de 1.750.000 dólares. Bianchi no será el entrenador del equipo, sino el manager. Y en su contrato existe una cláusula que impide que el Virrey se haga cargo del equipo en caso de que el entrenador en ejercicio decida renunciar o sea despedido por el club. En Mar del Plata, Bianchi se había reunido con Ischia. Delinearon el futuro del plantel, discutieron sobre los refuerzos y hablaron del arquero. Esta tarde Bianchi apareció por La Boca con las noticias frescas que traía de la costa y quedó ligado a Boca. El manager, o sea Bianchi, tendrá la facultad de vetar o aprobar la contratación de cualquier futbolista.
